Válvulas de control de bola de sector
La válvula de control de bola de sector RAMÉN tipo KS se desarrolló en 1967 y desde entonces miles de válvulas se han instalado en:
- Fábricas de papel y pulpa
- Cementeras y siderúrgicas
- Plantas de proceso de carbón y minerías
- Plantas de barbotina
- Plantas de tratamiento de agua endurecida
- Industria química y farmacéutica
- Refino, gas y centrales térmicas
Debido a su autodrenaje, excelente comportamiento en regulación, muy buena resistencia a la abrasión, fácil de automatizar e instalar en línea y su alta estanqueidad en condiciones críticas, se recomienda para:
- Celulosa y pasta de papel
- Suspensiones con líquidos abrasivos tales como minerales de hierro, barbotina, lechada de cal, cenizas, arenas, etc.
- Soluciones ácidas y cáusticas
- Aire, oxígeno, metano, nitrógeno, amoníaco.
- Aceites y aguas duras
- Regulación de altos caudales y fluidos abrasivos
RAMÉN, la mejor elección para la abrasión
Las válvulas RAMÉN se fabrican en acero inoxidable AISI 316, titanio y fundición nodular ecubierta de goma blanda, con DN desde 25 a 400 mm y caudales que alcanzan los 6000m3/h Diseño wafer para montaje entre bridas PN 10-40 y ANSI 125-600 Lbs.
Sus limitaciones son 40 bar y 200ºC. Todas estas combinaciones junto con su diseño hacen que sea la mejor elección para la abrasión. El diseño que presenta esta válvula de bola de sector cuando está en posición de regulación (momento en el que aumenta la velocidad del fluido y la erosión), la hacen no desgastar el obturador y conseguir muy buena estanqueidad al cierre en comparación con otro tipo de válvulas utilizadas para esta misma aplicación.